A veces es como ahogarse
Entre los pensamientos
Un laberinto de emociones
Un alma al borde del acantilado
Un camino a ninguna parte
Una metáfora inacabada
Simplemente no se puede describir
Una prisión en el pecho que me acorrala
Miedo, corriendo por mis venas
El palpitar de un corazón aterrado
Que tiene miedo a la vida
Que tiene miedo a la muerte
Y cada mañana al despertar todo se reinicia
Un nuevo amanecer con nuevos pensamientos
Y un día más se acerca
Y un día más se aleja
¿Dónde acabaremos?
¿Hasta donde seré capaz de llegar sin tropezar?
Sólo quiero respuestas, sin tener nada que preguntar
Quiero respuestas para preguntas sin formular
Me abrazo a la noche sin poder respirar
Las preguntas aprisionan mis pulmones
Y fumo de la incertidumbre y el vacío
Y las dudas
Engañar con verdades incómodas
A veces atisbamos las respuestas
O no las aceptamos
Arrancamos esa página, olvidada
Caminar, adelante, eso dicen
¿No es así de sencillo?
Arrepentirse de las lágrimas que hemos guardado
Mi prisión de hielo derretido
A veces sólo necesito sacar este nudo de palabras
Que se crea en mi garganta
Un mar
Que inunda mis sentimientos
