18 dic 2013

Carta a los Reyes Magos

Queridos Reyes Magos:
Sé que no me he portado muy bien, he tenido mis cosas malas y cosas buenas, y sí, sé que no me he esforzado mucho en las clases y lo reconozco, no obstante, siempre he intentado ayudar a mi madre en todo lo que he podido, he sido bueno, gentil y educado, he ayudado cuando necesitaban mi ayuda y he dado las gracias cuando me han ayudado. He aquí mi petición para este año.

Quiero ser feliz. Vosotros que me vigiláis durante todo el año sabéis lo que necesito,  ¿verdad? Sabéis que me siento solo, que no puedo más, que por mí salía todos los días del año si pudiera. Sabéis los amigos que tengo, ¿verdad Melchor? Sabes quiénes me importan de verdad. 
Una pregunta quiero haceros... ¿Por qué están  tan lejos? ¿No viajasteis desde las lejanas tierras para visitar a un niño recién nacido? ¿Podéis hacer lo mismo pero con los que de verdad me importan? ¿Podéis traer a todas aquellas personas que han aportado su granito de arena en mi vida pero que, por motivos de distancia, no puedo estar con ellos? ¿Tan difícil es poder abrazarles y mostrarles cuanto me importan por todo lo que han hecho por mí? 
No quiero un móvil de 200 euros con wi-fi cámara Internet y mierdas de esas, no quiero una PS3 (Aunque no estaría mal, si la añadís en el lote, perfecto), lo único que quiero es sentirlos cerca... quiero estar con ellos, hablar con ellos, reír y llorar, jugar y gritar, apoyarnos cuando lo necesitemos, hacer locuras juntos.
 No aguanto más esta soledad... no puedo con ella, aunque no lo parezca en el fondo deseo salir de mi casa, salir a hacer cualquier cosa, pasear, hablar, comer pipas sentados en un banco, lo que sea con tal de que estuvieran ellos conmigo... Mi madre se queja de que no salgo, que me llevo todo el día encerrado en casa... si de verdad ella supiera las ganas que tengo de salir, las ganas de que todo esto cambiara, las ganas de no estar en esta situacion, cambiarlo todo. 
Si pudiera, haría lo que fuera por no estar así. Pero al fin y al cabo... supongo que yo me he merecido esto. Si no hubiera conocido Internet no tendría que estar así, si no hubiera intentado conocer gente no estaría tan dolido... a lo mejor es mi culpa o a lo mejor no, quién sabe, sólo sé que esto es lo único que de verdad deseo en todo mi corazón más que nada en el mundo (aparte de los estudios). 
A lo mejor otras personas lo verán como una estupidez, e incluso mi familia podría reírse de mí por esto, pero me da igual, yo solo quiero que sepáis que de verdad, todos mis problemas acabarían si me concediérais esto... gracias por vuestra atención.
Pd: Decidme que queréis de acompañamiento con la leche para ir preparándolo, que luego se me viene la hora encima y se me olvida.

Atte: Rafael

6 dic 2013

Historia.

El silencio me mata y las palabras vacías sin sentido solo consiguen rellenar este vacío existencial que siento. Te vas y no te vas, te quedas en planta esperando una señal. Intento relajarme, respirar y tranquilizarme, volverás. Intento encontrar algo a lo que aferrarme, ya estoy perdido y no sé ni lo que digo. Repito las mismas palabras siempre, he perdido la motivación. Lo he perdido todo, lo he sacrificado todo y no he ganado nada. Decepción. 
Escucho el silencio, tiene más que decirme que tus palabras, tiene más que enseñarme que todo lo que me has mostrado. Estabas cerca y a la vez estabas lejos, estabas tan viva pero yo te veía tan muerta... tan marchita, tan imperfecta. Nada es para siempre.
Todo se degrada, todo se acaba, todos los ríos van a parar a la mar, que es el morir, como los antiguos escritores decían. Me creo mucho y soy tan poco, copio palabras de otros y los pego como míos. 
No sé ya ni escribir, solo tú consigues aliviarme, o compañera amarga y solitaria que con tu melodía consigues levantarme el ánimo, esos altos y esos bajos, ese sol que resuena en mi cabeza y hace que mis labios formen una curva convexa y mis ojos se abran hacia el cielo y grite "EUREKA".
Pero todo esto es tan pasado, todo esto está olvidado, o eso creía, pero te vi allí, nuestras miradas se cruzaron, y posaron en mis hombros los recuerdos y me mostraron el tiempo pasado, aquellas manos entrelazadas paseando por unas calles oscuras. Tu sonrisa en mi sonrisa, tu mirada en mi mirada, y te vas, te alejas, te marchas perpleja ante la posibilidad de girarte y decirme te quiero, pero no lo hiciste. ¿Qué nos pasó? ¿Se nos fue el amor? Preguntas sin respuesta para un joven soñador
Pero eso es tan lejano... dicen que lo que importa es el presente, pero si aún vives en el presente, ¿qué puedo hacer yo? ¿Eliminarte? Sería tan fácil, pero mi goma de borrar no puede con tantos recuerdos.
Todavía apareces a veces en mis recuerdos, lejana y sonriente, pero todo ha cambiado, ya no sonrío cuando te veo, fue bonito mientras duró, o eso creo. Sintiéndolo mucho arranqué todo lo que me quedaba de ti y dejé un espacio en blanco para rellenar, una nueva vida, una nueva historia, un nuevo horizonte que cruzar, y ahora se está rellenando, cada segundo, cada instante, cada momento, mi historia se rellena de palabras que algún día, el señor todopoderoso del cielo no lo quiera, también tendré que arrancar, pero eso no va a suceder ahora, porque esta historia seguirá, y cuando me vaya, le colocaré el punto final.