Era por la tarde, y me encontraba buscando en tiendas de segunda mano algún juego que estuviera barato y me interesara, y pudiera matar mi tiempo, ya que me encontraba bastante aburrido. Fue entonces cuando lo encontré, en ese escaparate bastante sucio, debería decir, y entre un montón de cartuchos de GBA esparcidos como si no importasen...
"Golden Sun: La Edad Perdida"
Perdido... eso creía yo... Y ahí estaba, exhibiéndose como si estuviera tomando el sol, ajeno a todo lo externo.
- Manu, ¿Has visto mi juego de Golden Sun? No lo encuentro...
- Lo habrás dejado por ahí y se ha perdido...
Maldita sea tu estampa, me engañaste como siempre lo hiciste. A saber la mierda de dinero que te estafaron por el juego, ya que en estos lugares nunca saben que valor tiene las cosas.
- Perdona señor... ¿Le interesa algo de aqui?
- Oh si claro, el Golden Sun.
- ¿Perdón?
Ah claro, es verdad, que ni saben lo que es... Normal que cueste tan barato...
- Este juego - Dije señalando el juego en cuestión.
El dependiente abrió el escaparate y se fue a caja, a lo que tuve que acompañarle para pagar su precio y poder volver a tener el juego en mis manos.
Cabreado, llegue a casa, cogí mi Game Boy Advance SP, introduciendo el juego y encendiendo la consola.
La última vez que vi esta pantalla de carga... podrían ser perfectamente 5 años... que recuerdos, y pensar que ha estado tanto tiempo perd... perdi... espera...
En la ranura de juego pone como nombre de personaje Paco... no recuerdo... este no es...
Mi hermano entra a mi habitación.
- Rafa, ¿recuerdas que me dijiste que perdiste un juego? Lo he encontrado entre los folios del armario del salón, al parecer mama lo vería ahí perdido y lo guardó en cualquier sitio, estarás contento.
Me tendió el juego y lo cogí con gusto.
Me senté.
Miré la GBA.
La GBA me miró a mí.
Ahora tenía dos Golden Sun.
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